Esta serie está dedicada a cuadernos famosos que, de una u otra forma,
han dejado su huella en la historia. Leer más: Cuadernos famosos
Samuel Pepys (UK, 1633-1703) fue político, funcionario naval, y también el más célebre diarista británico. Contó en su diario durante toda una década (1660-1669) tanto sus asuntos particulares como los eventos nacionales de los que era testigo, y lo hizo tan detalladamente que aún hoy este documento sigue siendo la principal fuente de información para los estudiosos de esa época histórica.
Como curiosidad, les cuento que el diario fue escrito en taquigrafía, y en algunos pasajes, los más comprometidos para el autor, usó una especie de código mezclando palabras y frases en otros idiomas como español e italiano. No quería que sus contemporáneos lo leyesen, pero se encargó de que conservarlo en su biblioteca para la posteridad.
La primera vez que supe del diario de Samuel Pepys fue gracias al libro 84, Charing Cross Road de Helene Hanff, una recopilación de la correspondencia entre la autora y Frank Doel, un librero inglés. Y como es un libro delicioso, prefiero dejarlos con la lectura de los fragmentos en los que hace referencia a este documento. ¡Que lo disfruten!
15 de octubre de 1950
¿Tienen algún ejemplar del Diario de Sam Pepys? Lo necesito para las largas tardes invernales. (H.H.)
1 de noviembre de 1950
En este momento no tenemos en existencias ningún ejemplar del Diario de Pepys, pero buscaremos uno para usted. (F.D.)
15 de octubre de 1951
¿Y A ESTO LO LLAMA USTED UN DIARIO DE PEPYS?
Pues no es un diario de Pepys, sino una miserable colección de FRAGMENTOS del diario de Pepys, obra de un entrometido editor al que más le vale estar pudriéndose en la tumba.
Me dan ganas de vomitar.
¿Dónde está lo del 12 de febrero de 1668, cuando su mujer lo sacó de la cama y lo persiguió por el dormitorio con un atizador al rojo vivo?
¿Dónde todo lo del hijo de sir W. Pen, que dio tantos quebraderos de cabeza a todo el mundo con sus ideas cuáqueras? Sólo UNA vez se le menciona en todo este remedo de libro…, y ha venido a parar a mis manos, a mí…, que soy de Filadelfia…
Ahí van dos mugrientos billetes de un dólar; me las arreglaré con esta cosa hasta que me encuentren un auténtico Pepys. DESPUÉS destrozaré este engendro de libro, página a página, Y LO EMPLEARÉ COMO PAPEL DE ENVOLVER. (H.H.)
20 de octubre de 1951
Ante todo, le ruego que acepte mis disculpas por el Pepys. La verdad es que tenía la impresión de que se trataba de la edición completa de Braybrooke, y comprendo lo que debió de sentir usted al advertir que faltaban sus pasajes favoritos. Le prometo examinar el próximo ejemplar que nos llegue a un precio razonable y, si contiene el pasaje que usted menciona en su carta, se lo enviaré de inmediato. (F.D.)
18 de septiembre de 1952
Frankie…, ¡adivina quién me llegó mientras tú estabas de vacaciones! ¡SAM PEPYS! Por favor, da las gracias a quien se encargó de enviármelo. Lo recibí hace una semana, y salió, en forma de tres sólidos volúmenes de color azul marino, de entre las cuatro páginas arrancadas de un periódico sensacionalista. Leí esas páginas durante el almuerzo, y después de la cena la tomé con el bueno de Sam.
Me dice que te diga que está ABSOLUTAMENTE ENCANTADO de encontrarse aquí; que su anterior propietario era un patán que ni siquiera se molestó en cortar sus páginas. Yo las estoy destrozando, porque es el papel biblia más fino que jamás he visto. Aquí lo llamamos «papel cebolla», y es un nombre que le va muy bien. Pero con un papel más grueso la edición habría requerido seis o siete volúmenes; así que doy las gracias a ese papel biblia. (H.H.)
Créditos de imagen:
1. Retrato de Pepys por John Hayls (1660): Wikipedia
2. Volúmenes: Wikipedia
3. Páginas del diario de Pepys: www.pepys.info
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